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Que mienta si me muero

Mi vida en un fin de semana

La verdad es que el diario de este fin de semana daría para otro weblog, pero lo voy a resumir en una sola palabra: demasiado.
El viaje de ida muy bien, no hemos sufrido ningún percance destacable. Es increíble la cantidad de puticlubs que hay en la zona de Benavente, hay mas carteles de Hostal-Club que de tráfico. Una vez que llegamos a Villanueva, todo sobre ruedas, el alcohol empezó a bajar por mi garganta y las preocupaciones empezaron a irse de mi cabeza, ya se sabe, en los primeros momentos de la borrachera, cantidad de alcohol ingerido y preocupaciones son inversamente proporcionales.
Luego empezó el sentimiento de culpabilidad, el diálogo conmigo mismo con N como personaje central:
- Me apetece hacerlo, ¿porqué no voy a poder hacerlo?
- Porque no, simplemente porque se lo prometiste a ella, prometiste que nunca más y tienes que cumplirlo.
- Pero porque se lo tengo que deber a ella, ya es bastante jodido tener que estar el 80 por ciento del tiempo pensando en ella, ya está bien.
- Se lo debes y ya está, ¿o es que quieres decepcionarla?
- ¿Qué más da decepcionarla, crees que así conseguiré algo?
- Probablemente no, pero por lo menos evitarás que ella se enfade.
- Pues eso, no conseguiría que se fijara en mi de ningún modo, que mas da si piensa que soy un cabrón que no cumple sus promesas o un tio genial que no la hará enfadar nunca, al final el resultado es el mismo.
- ¿Nunca vas a estar con ella, lo sabes no?
- Lo se, ella nunca estaría con alguien como yo.
- ¿Pues a que esperas?, hazlo, diles que tu tambien te apuntas.
- ¿Pero no se suponía que eras tu el que me iba a tratar de convencer de que no lo hiciese?
- Ya ves , las cosas cambian, al final me has convencido tu a mi.
- Que curioso ¿verdad?.
- Pues si, pero que sepas que nunca se fijará en ti, solo eres su amigo, el que se preocupa por ella, el que está a su lado, el que la apoya, nunca jamás conseguirás ser mas que eso, asi que no lo intentes.
- Ya lo entiendo, es psicología inversa, intentas convencerme de todas formas diciendome que no lo haga porque me va a dar lo mismo.
- ¿De que demonios hablas? Mira no me lies que me tienes harto, ya es bastante jodido tener que hacer de consejero responsable para alguien que esta tan loco como este, me voy de fiesta.
- Me parece una buena idea, me voy contigo.

Y así acabo la cosa, ella enfadada conmigo y mi angelito del hombro derecho yéndose de fiesta con el pequeño diablo de mi hombro izquierdo, me los encontré en el servicio de uno de los bares y se lo estaban pasando genial los dos cabrones juntos.

El sábado estaba bastante cansado y decidí que dijeran lo que dijeran las voces de mi conciencia, esta vez no les haría caso. No le di motivos para enfadarse a N, ni me los di a mi mismo. Supongo que en parte por los porros que nos metimos entre pecho y espalda.
El domingo pasó casi sin pasar, entre el ruido de fondo de mi conciencia debatiéndose entre hacerme sentir infinitamente culpable por haberla defraudado, y hacerme sentir infinitamente desgraciado porque nunca sere lo que ella busca en los demás.
Al llegar a casa me di cuenta que no es sano pasarse media vida pensando en N. No es que no se lo merezca, es simplemente que no merece la pena. Demasiado esfuerzo, ninguna recompensa.

PD: Lo reconozco, tengo en mis manos el libro de Harry Potter y lo estoy devorando.
PD: Prometo no volver a pensar en N. Prometo dedicarme solamente a mi. Prometo que a partir de ahora lucharé por cambiar... Y esta vez prometo que será la definitiva, prometo que no romperé mis promesas, prometo que nunca más le prometeré nada a ella, prometo...

2 comentarios

Dany -

Después de todo no se mataron, aunque alguna parte sí regresó medio muerta...como ya te dijero, cambies, o le gusta el paquete entero o no, si no, al diablo con todo y a seguir la vida, no es fácil, pero es loq ue hay que hacer.

la hora de las brujas -

¿Sigues vivo?Me alegro de q no te matarás en el camino, aunque suene raro decirlo así. Siento que te hallan roto el corazón. Se tú mismo, y no intentes cambiar para gustar a nadie. Si alguién te exige que cambies no merece la pena. Sé que pensarás que es muy fácil decirlo, pero desgradiadamente a mi tb me han roto el corazón. Suerte y un abrazo