Breve ficción #1
En ese momento me acordé de todos esos chistes que empiezan con "tengo una noticia buena y otra mala que darle", en mi caso la buena era que no iba a morir, pero la mala era tan horrible, que no me importó en absoluto:- No volverás a volar, tus alas han quedado demasiado dañadas, no podemos hacer nada.
Y qué se suponía que debía hacer yo de ahora en adelante, ¿quedarme en casa mirando por la ventana? viendo cómo todos planeaban por las calles, trazando espirales perfectas, observando lo fácil que parece mientras yo ni siquiera puedo levantar los pies del suelo un poquito.
No se deprima - dijo el doctor- En estos casos lo mejor es buscar un hobby; navegue por internet, haga maquetas, vea la televisión, escuche mñusica, lea un libro, o mejor aún, escriba uno.
Lo primero que me vino a la cabeza tras salir de la clínica, fue el enorme esfuerzo que había hecho para conseguir mis alas, definitivamente Dios no debería dejar que un angel perdiera sus alas, algo había dejado de funcionar allí arriba, quizá también estaba empezando a olvidarse de nosotros como se había olvidado hace tiempo de los de abajo.
1 comentario
Nimue y su kaos -
besitos