Blogia
Que mienta si me muero

El retorno del Trantor y su correo absurdo.

El retorno del Trantor y su correo absurdo. He vuelto, de visita pero he vuelto. Después de tirarme todo el mes de Junio en le pueblo estudiando (con agridulce resultado), he empezado a currar. De hecho el viernes 1 de Julio, al acabar el último examen, tuve que salir pitando para el primer día de curro. Conclusión, no he podido disfrutar de la merecida fiesta fin de exámenes. Pero este finde la revancha. Me voy a Madrid, al una especie de fiesta despedida de un amigo que estudió allí hasta este año. No se cómo va a ser la cosa, lo único que sé es que vamos a una fiesta en un chalet, que llevamos como 50 cervezas para cada uno, y que tengo que llevar una sábana vieja para la "fiesta de la toga". Si esto no se parece a una película americana de universitarios, Fraga es comunista.

Supongo, no, mejor dicho sé, que me lo pasaré genial, quizá un poco fuera de sitio con tanto pijerío por ahí, pero mi capacidad de integración ha crecido tanto éstos últimos meses, que me veo convertido en el centro de la fiesta. Ya se verá como acaba todo, prometo noticias, crónica y descripción detallada de en qué consiste la fiesta de la toga, incluso puede que ponga alguna foto para descojone del personal.

En otro orden de cosas, he de decir que la foto del post son bozales (supongo que nadie lo dudaría). Todo eso viene al tema de mi correo muzzle@hotmail.com (muzzle = bozal). Me lo hice hace años ya, obsesionado por una canción homónima de Smashing Pumpkins (Disco Mellon Collie And The Infinite Sadness). Lo curioso del tema es el número de contactos que tengo en esa cuenta, que suma un total de 51. Alguien se preguntará ¿pero tantos amigos tienes con lo insoportable que pareces? Pues no, no tengo tantos amigos, de hecho no conozco a ninguno de los 51. Cada vez que abro ese correo, me encuentro con varios avisos de "nosequien le he agregado a su lista de contactos..." Yo como soy muy buena gente, admito siempre a la gente, supongo que debido a mi terrible y solitaria infancia y mi deseo de hacer amigos. Ya voy por 51 y sigo sin saber porqué demonios me agregan, que nadie me entienda mal, no me molesta, más bien al contrario, es que me intriga saber porqué la gente me añade a su messenger. Gracias a esta cuenta he practicado mi ingles con varios americanos obsesionados con algo llamado Emo Punk, he charlado de aviones con un piloto griego de aerolíneas llamado Vassily, he tratado de descifrar lo que decía un aleman llamafo Geoffrey Vliegen sobre España (Spanien) y la cerveza de barril (Fassbier), y he podido charlar con varios españoles bastante majos por norma general.

Supongo que es un nombre bastante común (de hecho me extrañó bastante que estuviera disponible) pero el caso es que cuando pregunto, nadie me ha agregado, todos dicen que les ha salido el mensaje de marras. Yo me rindo, no pienso investigar más, que algún que otro chasco me he llevado ya. Si alquien me quiere agregar, que sepa que tendrá el dudoso honor de haberlo hecho conociéndome, y que no se preocupe, abro el messenger una vez al mes, y no suelo chatear. No soy nada pesado.

Me despido ya, sin saber muy bien cuando podré actualizar de nuevo. Saludos, besos y nubes, muchas nubes.

PD: El cielo sigue siendo increible en el torreón del trabajo (véase foto de portada).

0 comentarios